Marbella Centro18 Jul, 2017 Manolo Alarcon

Desde el encantador casco antiguo —de empedradas y sinuosas calles, con su hermosa Plaza de los Naranjos y sus acogedores restaurantes—, pasando por la animada avenida Ricardo Soriano con sus tiendas de lujo y sus animados cafés, hasta llegar a la marina, rodeada de atractivos bares desde donde contemplar los barcos que se balancean en el pequeño y elegante puerto deportivo, Marbella Centro tiene algo que ofrecer a cada uno de los que la eligen como lugar de vacaciones o de residencia.

En el corazón de Marbella Centro se encuentra la avenida Ricardo Soriano, llena de tiendas, bancos, restaurantes, cafés y oficinas.

Justo al norte se encuentra el pintoresco casco antiguo de la ciudad, un dédalo de callejuelas en las que los vivos colores de las flores destacan contra el encalado de las típicas casas andaluzas y donde puede disfrutarse de restaurantes y bares tradicionales.

Entre la avenida y la playa se sitúan las bellas plazas sombreadas que invitan al relax y que se han convertido también en «marca de la casa» en esta ciudad mediterránea.

Naturalmente, Marbella vive orientada hacia el mar, donde el moderno Paseo Marítimo se extiende a lo largo de una hermosa playa y cuenta con cafés de vistas panorámicas, bares, restaurantes, heladerías y mucho más.

El Parque de la Alameda de Marbella, el pasaje principal entre el Paseo Marítimo y el centro de la ciudad, cuenta con una colección de impresionantes esculturas de Salvador Dalí.

El pequeño puerto deportivo se alza sobre el elegante Paseo Marítimo, cuya prolongación se extiende hasta Puerto Banús.

El embarcadero de los yates está bordeado por un pequeño pero popular conjunto de restaurantes y bares que, junto con el pintoresco casco antiguo, se incluyen entre las principales atracciones nocturnas del centro de la ciudad.

En resumen, Marbella Centro lo tiene todo, desde restaurantes para poder disfrutar de la más selecta gastronomía (incluidos locales con estrella Michelin), ir de compras o contratar todo tipo de servicios profesionales.